CISJU
Línea | Pobreza, Territorio y Exclusión Social
La pobreza y la exclusión social se comprenden de manera multidimensional y los procesos y dinámicas asociadas a ellas se analizan de modo situado territorialmente. Esto significa que las carencias, déficits, precariedades y brechas de grupos de la población respecto de estándares de recursos y atributos necesarios para incorporarse y participar de la vida en sociedad en forma plena, en un determinado momento histórico, adquieren formas y características específicas en los diferentes territorios, en los que las desventajas o ventajas se pueden superponer, las acciones institucionales pueden caracterizarse por su ausencia/ineficacia o por su concentración efectiva, y la capacidad de acción colectiva de los actores sociales puede ser significativa o limitada, todo lo cual configurará un determinado marco socioespacial.
El análisis de las características estructurales de los territorios (carácter urbano, rural o rur-urbano, prevalencia de pobreza), junto con sus trayectorias históricas y dinámicas relacionales entre Estado, mercado y actores sociales/comunitarios, constituyen un marco de comprensión de los fenómenos de pobreza y exclusión a nivel territorial que favorece también las posibilidades de aportar a la transformación social orientada hacia una mayor justicia social y desarrollo humano.
Junto con la perspectiva socioespacial, otra vía de entrada a la pobreza y a la exclusión que trabaja esta línea de investigación es la (re)producción de la división social y sexual del trabajo, que jerarquiza a los individuos según las posiciones de clase y de género derivadas de la participación en el mercado laboral y en el hogar. Los trabajos son tanto experiencias y modos de vida como sistemas de relaciones socio-simbólicas; superan la noción de empleo, ampliándose al intercambio y distribución de productos, bienes y servicios no pagados.
Los trabajos (relativos al empleo, al voluntariado, el del hogar, incluyendo el cuidado), así como las instituciones que los producen, son analizados en contextos de transformación, acoplamiento y crisis que, a su vez, impactan directamente sobre los procesos y condiciones de trabajo. Tanto las experiencias como los condicionamientos sociales e institucionales relativos al trabajo permiten conocer las posibilidades que tienen los actores sociales de enfrentar o resistir los escenarios actuales.
Las subáreas de estudio de esta Línea son:
- Análisis territorial de la pobreza, los procesos de exclusión y las políticas sociales.
- Movimientos sociales, acción colectiva y participación sociopolítica en territorios con elevados niveles de pobreza.
- Vínculos y tensiones entre formas estructurales de producción del territorio (leyes de mercado, institucionalidad pública) y la subjetividad de los actores desde una perspectiva interseccional e histórica.
- Implicancias de la dimensión socioespacial en la intervención social en general y en las políticas de acción sobre los territorios desfavorecidos en particular.
- Procesos del mercado de trabajo, organización social del cuidado, políticas dirigidas a las familias y derechos de ciudadanía.
Investigadoras/es
Coordinadora: Dra. Ana María Álvarez Rojas